François Boucher

23/11/2013 1.508 Palabras

Obra El triunfo de Venus, 1740. Óleo sobre lienzo. 130 x 162 cm. Museo Nacional de Estocolmo (Stockholm Nationalmuseum). Hoy se puede apreciar a Boucher con mayor ecuanimidad, como un pintor demasiado fácil y brillante, artificial y superficial, pero muy superior a todos sus imitadores. Entre sus mitologías galantes, rosas y anacaradas, tan rococó por sus líneas ondulosas y movidas, hay obras maestras como El baño de Diana (Museo del Louvre) o El Triunfo de Venus (Museo Nacional de Estocolmo). Sus escenas pastorales o novelescas (Historia de Armida), sus paisajes pintorescos, irreales y poco expresivos, valen por la fluidez de la pincelada como por la gracia de la composición. Ha sido tal vez como autor de numerosos modelos para las manufacturas de tapices de Beauvais (Historia de Psique, Suite Chinoise, etc.), con su ambiente encantador de ópera-ballet y de exotismo, como Boucher ha demostrado mejor la ingeniosidad y la alegría de su arte.

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info