NACE UN FAMOSO PLATILLO Se cuenta que el mole poblano, el platillo clásico de México, nació de la inesperada enfermedad que acometió a la Madre del Convento de Santa Rosa de Puebla, en el siglo XVIII, las vísperas de que el señor Arzobispo fuera invitado a comer con las monjas de aquel convento. He aquí que un día antes cae enferma la cocinera mayor y creadora de los mejores guisos del convento. La Madre Superiora Ilama a la buena monjita que auxilia a la encargada de cocina, y sin más ni más le ordena preparar un buen platillo para el señor Arzobispo, so pena de excomunión si no lo hace. «¡Jesús, María y José!», clama la infeliz hermana ante semejante orden perentoria. ¿Y ahora qué hacer? Presta y veloz se decide y va a la gran cocina. Las cocinas poblanas son famosas por su orden, amplitud y hermosos azulejos que adornan sus paredes. Inmóviles y severos en los estantes, están los frascos con todas las especias, aguardando y observando cómo va a resolver, la...