La lucha por la vida II: 032
none Pág. 032 de 121 La lucha por la vida II Primera parte Pío Baroja La primera salida nocturna que hizo la baronesa fue, acompañada por Manuel, a casa de su amiga cubana. Salieron la baronesa y Manuel después de cenar. La cubana vivía en la calle Ancha. Llamaron en la casa: les abrió un criadito con librea azul y galones dorados, y entraron, por un corredor, en una sala muy iluminada, adornada con lujo barato y chillón. En medio había un aparato eléctrico con siete u ocho bombillas, un sofá grande con flores, dos sillones dorados al lado de una chimenea, y sobre el mármol de ésta, un reloj en forma de bola, un barómetro con un martillo, un termómetro con un puñal y otra porción de cosas con formas absurdas. Por todos lados se veían fotografías. No había allí más que unas cuantas mujeres de mal aspecto, que se levantaron humildemente. La baronesa se sentó, y al poco rato entró la cubana, una mujer ordinaria y brutal, vestida con un traje muy...
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