Enrique IV: Segunda parte, Acto II, Escena II

Enrique IV Segunda parte: Acto II, Escena II de William Shakespeare ACTO II ESCENA II LONDRES- Otra calle. (Entran el Príncipe Enrique y Poins) PRÍNCIPE ENRIQUE.- Créeme que estoy excesivamente fatigado. POINS.- ¿Cómo es posible? Nunca hubiera creído que el cansancio se atreviera con una persona tan altamente colocada. PRÍNCIPE ENRIQUE.- Y sin embargo, es cierto, aunque esa confesión empañe el esplendor de mi grandeza. ¿No es una indignidad de mi parte tener ganas de beber cerveza ordinaria? POINS.- La verdad es que un príncipe no debería tener el gusto tan depravado para recordar ni la existencia de esa insulsa droga. PRÍNCIPE ENRIQUE.- Hay que convenir entonces en que mi apetito no es de naturaleza real, porque te doy mi palabra que en este momento recuerdo la existencia de esa humilde bebida. Pero el hecho es que tan triviales reflexiones me harían perder el cariño a mi grandeza. ¿Qué mayor desgracia para mí que recordar tu nombre? ¿O reconocer...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información