El clavo :15
- XV -El juicio «El Juez es una ley que habla y la ley un Juez mudo. La ley debe ser como la muerte, que no perdona a nadie. (MONTESQUIEU).» Gabriela -llamémosla, al fin, por su verdadero nombre- estaba sumamente pálida; pero también muy tranquila. Aquella calma, ¿era señal de su inocencia, o comprobaba la insensibilidad propia de los grandes criminales? ¿Confiaba la viuda de don Alfonso en la fuerza de su derecho, o en la debilidad de su Juez? Pronto salí de dudas. La acusada no había mirado hasta entonces más que a Zarco, no sé si para infundirle valor y enseñarle a disimular, si para amenazarle con peligrosas revelaciones o si para darle mudo testimonio de que su Blanca no podía haber cometido un asesinato... Pero, observando sin duda la tremenda impasibilidad del Juez, debió de sentir miedo, y miró a los demás concurrentes, cual si buscase en otras simpatías auxilio moral para su buena o su mala causa. Entonces me vio a mí, y una llamarada de...
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