Capítulo 1. Iconos mitológicos y de la biodiversidad marina
Desde que inicié mi investigación con estos fascinantes seres, con frecuencia muchos de mis amigos, conocidos o perfec tos desconocidos han puesto cara de sorpresa, acompañada de una sonrisa más o menos amplia, al enterarse de que mi trabajo como científico estaba dedicado a estos peces. La ma yoría, mientras abrían con incredulidad sus ojos de par en par, exclamaban alguna frase corta como: “¡Qué guayyy!”, “¡Qué chuuulo!” o “¡Qué boniiito!”. Otros llegaron más lejos en sus comentarios, señalándome la inmensa suerte que tengo por trabajar con estos animales, cosa que, por otro lado, yo ya sabía. Hay un tercer grupo en el que incluyo a aquellos que te miran como si estuvieran poseídos y que, con cara de es cepticismo, te sueltan una frase lapidaria, sin miramientos ni rodeos, que podemos resumir en algo como: “Y eso… ¿se come?”. O, peor aún: “Y eso… ¿para qué sirve?”. Si tengo que ser sincero, debo decir que a nadie le gusta que se...
Está viendo el 7% del contenido de este artículo.
Solicite el acceso a su biblioteca para poder consultar nuestros recursos electrónicos.
Ventajas de ser usuario registrado.
Acceso sin restricciones a todo el contenido de la obra.
Sólo información contrastada de prestigiosos sellos editoriales.
Contenidos de renombrados autores y actualizaciones diarias.
La nueva plataforma del Consorcio ofrece una experiencia de búsqueda de fácil manejo y de gran usabilidad. Contiene funciones únicas que permiten navegar y realizar consultas de manera ágil y dinámica.
Convenios especiales: Enseñanza Bibliotecas públicas